En Future Energy he leído que el sector renovable supone un beneficio importante a la economía española e incrementan los puestos de trabajo. Los motivos de la recuperación en el sector se deben, principalmente, a las subastas energéticas y a la competitividad alcanzada por algunas tecnologías de generación eléctrica.
La baja producción hidráulica debido a la fuerte sequía del pasado año hizo que el porcentaje de energía a partir de renovables disminuyera de manera significativa. La caída de la generación hidráulica y el incremento de consumo energético en 2017, fue cubierto con generación fósil, lo cual lleva a una dependencia energética del 76,1%.
Las exportaciones de bienes llegaron a una cifra récord, lo cual arrojó un gran saldo neto exportador, nada menos que 3.117 millones de euros. Además, las energías renovables, durante el año 2017, evitaron la importación de innumerables cifras de toneladas de petróleo, es decir, evitaron grandes cantidades de emisiones de CO2.
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